Los mejores momentos de la vida no son planificados, pues estos no viven por la razón, nacen mas bien de la imaginación. Esos momentos que crecen para no ser pensados si no para ser vividos. Esos donde la cordura es cosa de aburridos y la censura es cosa del pasado. Eso es vivir llenando de momentos perfectos ese camino que es la vida, que al llegar a su destino se pueda terminar con una sonrisa en el rostro porque sencillamente fue mejor de lo que uno esperaba.
Diego Arias Zapata